Septiembre - diciembre 2021 - Volumen 3 - No. 9 ISSN: 2708 - 7794

ISSN-L: 2708 - 7794

Pp 203 213

                                                                                                                                                 

Alteridad y Otredad: El abordaje de la diversidad sexo-genérica en la práctica Universitaria

Aterity or Otherness: The approach to gender-sex diversity in University practice

 

 


Darwin Patricio García Ayala

darwin.garciaa@ucuenca.edu.ec

https://orcid.org/0000-0002-7114-8550

Universidad de Cuenca, Cuenca, Ecuador


Jonh Marcelo Chamba Zambrano

jchamba@utmachala.edu.ec

https://orcid.org/0000-0003-1515-9850

Universidad de Machala, Machala, Ecuador


 

Janina Lisbeth Collantes Conde

janina.collantesc@ug.edu.ec

https://orcid.org/0000-0002-0557-4439

Universidad de Guayaquil, Guayaquil, Ecuador

 

| Artículo recibido en junio 2021 | Arbitrado en julio 2021 | Aceptado en agosto 2021 | Publicado en septiembre 2021

 

Resumen

Centrar la atención en el otro, por el otro y con el otro, es el reto del quehacer educativo, sin descuidar en el proceso, aquellos aspectos inherentes en este “otro”, como son los afectivos y prospectivos. El término “otro” hace referencia a la persona, ser humano, discente, alumno, que son sinónimos utilizados según el contexto y las directrices que parten de la filosofía institucional que rige en cada centro educativo en sus diferentes niveles y formatos, con el único objeto de formar, o deformar al sujeto que aprende, bajo las premisas e improntas de un sistema egoísta que anula  las expresiones innatas y que desde la comprensión de la alteridad y la otredad   en los entornos educativos, y de manera especial el universitario, permitirá un abordaje sistémico que posibilite la creación de un espacio reflexivo para una nueva comprensión de la relaciones de poder entre docentes, estudiantes y la práctica universitaria, centrados estos, en los juicios y prejuicios de las diversidades sexo- genéricas dentro de los espacios de aprendizaje.

Palabras clave: Diversidad; género; alteridad; otredad; enseñanza

 

 

Abstract

Focusing attention pro the other, for the other and with the other, is the challenge of the educational practice, without neglecting in the process; those aspects inherent in this "other", such as the affective and prospective ones. The term "other" refers to the person, the human being, the learner, the student, which are synonyms used in accordance to the context and the guidelines that starts from the institutional philosophy that rules each educational center, in its different levels and formats with the only aim of training, or neglecting the subject who learns. Under the premises and imprints of an egoistic system that override innate expressions and that from the understanding of alterity and otherness in educational environments, mainly the university environment, will allow a systemic approach that enables the creation of a reflective space for a new understanding of the formidable relationship between teachers, students and university practice, which are focused on the judgments and prejudices of gender-sexuality diversities within learning contexts.


Keywords: Diversity; gender; alterity; otherness; teaching

 


INTRODUCCIÓN

En este  artículo  se  plasma  el  abordaje  de la comprensión de la diversidad sexo- genérica desde  una  perspectiva  integradora,  la que incluye el factor docente, el grupo de estudiantes, y el contexto inmediato en el cual se desenvuelven; la categoría relacionada con las minorías sexuales, son temas poco abordados en los procesos investigativos desde el área de las ciencias sociales, y de manera especial la relación

<diversidad – proceso educativo – docencia>, así señala Kozak (2006) cuando enfatiza que los estudios sobre diversidad sexual o los estudios sobre minorías sexuales se encuentran en procesos de consolidación y expansión, influidos desde algunas perspectivas, dentro de ellas el feminismo, factores que colocan estos temas dentro de la categoría de controversiales.

Según Skliar (2005) no se pretende hablar “del otro”, sin  tomar  en  cuenta  “al  otro”,  en tal sentido, este estudio de corte cualitativo interpretativo, pretende, a través de un adecuado diseño metodológico que vincula al sujeto de estudio con el problema, y que para este caso particular, implica el analizar y comprender desde los relatos de vida, la integración de una persona transgénero en un proceso de formación profesional, que se desarrolla en un espacio explícito como es la Universidad de Machala.

Este estudio pretende tratar de desmitificar lo que con cierta obsesión en la sociedad se llama “diferente”, y en particular cómo se acuña el término desde las acepciones de quienes, dentro del sistema educativo superior, participaron directa e indirectamente del proceso de transformación de nuestro sujeto de estudio; por otro lado, este caso particular encausará la comprensión de las diferencias relacionadas con la diversidad  sexual,  para  comprender  los tipos de violencias que se generan desde    el desconocimiento, la falta de empatía, los prejuicios engendrados desde varias vertientes ideológicas.


De manera especial este estudio revisará desde el relato de nuestra entrevistada, el papel del rol docente en la universidad, que de acuerdo con González (2009) indica que “el respeto al otro, la capacidad de mantener la identidad sin negar la alteridad o la relación con los diferentes son exigencias que deben transmitirse en la educación.”, labor que desempeña el docente al empoderar, comprender y socializar desde un ejercicio empático, la esencia de la persona, sin una etiqueta social, que la encasille y la limite.

Escobar (2007) manifiesta que la comprensión de los términos sobre homosexualidad, lesbianismo y transexualidad están en constante debate, aduce que  los hechos al respecto van desde la organización de actividades emancipadoras hasta aquellas que pretenden la integración de políticas públicas, con el fin de amparar y reconocer, dentro de un marco de derechos humanos a quienes participan en una democracia que proclama igualdad.

Hace años, las expresiones diversas de la sexualidad, aquellas que varían de  los  roles  de hombre y mujer, eran considerados actos inadecuados y sujetos de procesos punitivos dentro de los entornos escolares, posteriormente, este tipo de manifestaciones se enmarcan dentro de las expresiones propias de las personas que son reconocidas de forma paulatina, entendiéndose como una forma de vida y de expresión libre del desarrollo de la personalidad, y que en la actualidad se amparan incluso bajo un marco legal (Lozano-García & Castelar, 2018), ante esto, el en proceso educativo, y en especial el superior, el rol del docente tiene que colocarse los anteojos de la alteridad, para comprender objetivamente las diferencias, sin sumirse en estereotipos que condiciones su praxis.

Siguiendo en esta línea, la mirada integradora e inclusiva que debe concebir el docente, es determinante para la creación de un clima de sana convivencia y de afianzamiento de relaciones interpersonales:


 


En ese orden de ideas, esta polifonía de voces sobre los distintos modos de educar, de gestionar la convivencia en el aula y de  comprender  al  otro, es generadora de tensiones  que tendrían que ser conciliadas frente al quehacer profesional, las actividades laborales y las exigencias legales presentes en el entramado institucional. (Lozano-García & Castelar, 2018)

 

En tal sentido, el clima al interior del aula es un proceso sensible, coordinado y objetivo, que permita el dialogo sincero y la aceptación de las diferencias dentro de un conglomerado heterosexual que se constituye como una norma, a fin de erradicar el ejercicio de la violencia   en sus diferentes expresiones, siendo la más habitual, la violencia simbólica que se plasma en hechos de discriminación que van desde el uso de la palabra, la indiferencia y la exclusión.

Por ejemplo, cuando se les hace un mal gesto o preguntas molestas, ya sea intencionadamente o por falta de información…. tienen el potencial de hacer que las personas que las reciben se sientan socialmente incómodas, culturalmente fuera de lugaro incluso físicamente inseguras. Muchos  estudios  han  revelado que cuantas más microagresiones experimenta una persona, más probabilidades hay de que presente síntomas de depresión y angustia psicológica e incluso problemas de salud física. (Sándor, 2021)

 

De este modo, tomando en cuenta la experiencia de una estudiante transgénero (transfemenina), a través de la narración de su experiencia de vida en el claustro universitario permitirá esta comprensión integral, y, por ende, constituirse en un referente de acción a las vivencias docentes frente a la diversidad sexo- genérica y su empático abordaje.

 

DESARROLLO

Una de las mayores ventajas de este mundo globalizado es la  universalización de las tecnologías, que, sin importar las diferencias regionales, sociales y de creencias de las personas, ha proclamado e instaurado una cultura digital. Para Castells (2002) la comprensión de la sociedad red o de la sociedad del conocimiento, y desde esta perspectiva cultural, manifiesta que: Internet es la combinación de cuatro culturas que se apoyan mutuamente: la cultura universitaria de investigación, la cultura hacker de la pasión de crear, la cultura contracultural de inventar nuevas formas sociales y la cultura empresarial de hacer dinero a través de la innovación. Y todas ellas, con un común denominador: la cultura de la libertad. (Castells,2002)

Siendo en este caso, un entramado que conecta a todos los seres humanos y que permite la expresión de saberes y sentires, no queda ajena a esta realidad, la socialización de material multimedia que aporte y a la vez denigre, a    las minorías sexuales, como en este caso el transfemenino, arguyendo mitos, complejos, estereotipos y percepciones poco o nada erradas de la verdadera implicación del tema.

Estudios relacionados a la diversidad sexual en entornos de educación superior, determina que el abordar este tema aún sigue constituyéndose un tabú en  los  albores  de  este siglo, de manera especial concebir a la transexualidad como una identidad de género, que por lo general tiende a entenderse como un cambio se sexo (reasignación de sexo), y es allí donde se generan distorsiones en la concepción de los términos como homosexualidad, lesbianismo, identidad y orientación sexual.


 


En el DSM-V, la biblia de los trastornos mentales, desde el año 1995 encasilla a la transexualidad como una disforia de género, lejos de la acepción actual y válida que indica que transexualidad representa aquella situación en que la identidad de género no coincide con la anatomía corporal, dejando de lado aquellos términos peyorativos, que persiguen ofender y desprestigiar a quienes no encajan dentro de la norma binaria hombre-mujer. (Basterrechea, Bonilla, Borrero, Bottaro, & Fuentes, 2017)

Ejercicio interesante demanda la comprensión de estos términos sobre las minorías sexuales, además de inferir que implica la alteridad y otredad en la concepción empática de lo  diferente,  partiendo  del romper los estereotipos de las normas sociales convencionales y el contexto de los hablantes, y establecer que el lenguaje debidamente comprendido e interiorizado genera modelos adecuados comprensibles que posicionarán a grupos sociales que han estado en una situación de cierta desigualdad. (García-Barroso, 2016)

Es allí donde la función de la alteridad y la otredad se constituye en un elemento importante a ser considerado, obviamente luego de un adecuado proceso de concientización de lo que implican estos términos.

Sosa (2009) sobre la  otredad  indica  que es una postura de orden epistemológica que abarca elementos culturales, históricos y hasta políticos que hacen de las personas seres únicos que se permiten salir de categorías homogéneas, siempre y cuando aquellos elementos que los constituyen como seres humanos, sean avalados, por así decirlo, en la práctica y el ejercicio de sus derechos como individuos en un contexto especifico.

De manera paralela, González (2019) reflexiona e indica que la alteridad es el reconocimiento del otro en la necesidad de comunicación entre los otros, que parte de un espacio de encuentro entre egos (personalidades) y que se hace evidente este reconocimiento, para que, dentro de las diferencias personales evidenciadas en la cotidianeidad, se generen espacios de sana convivencia y de apropiación de la interacción social.

En definitiva, estos términos pueden generar confusión, su diferenciación es mínima, así lo establece González (2009) al correlacionar estas definiciones, indicando que:

Otredad y alteridad se usan comúnmente como sinónimos. Otredad se refiere al otro mientras que alteridad deriva del latín alter que también significa “otro”. En este sentido, estos dos conceptos parecen diferenciarse solo en su raíz etimológica. A pesar de ello, otredad es más usado como el proceso de separación de uno mismo para crear consciencia sobre nuestra propia individualidad mientras que el uso de alteridad hace referencia a la identificación con un otro distinto a uno mismo para el mismo proceso. (González F. , 2009)

 

Así,amaneradeconclusión,sepuedeexpresar que la diferenciación entre estos términos radica desde la perspectiva del observador y del observado, la una es endógena (mi yo interno), la otra de orden exógena (mi yo externo en la convivencia social) respectivamente.

Dentro de estas perspectivas, y ya inmersos en la práctica académica, se presentan postulados que, más allá de los elementos que intervienen en la alteridad y otredad, hacen alusión de que el acto educativo es un acto de amor, Hernández (2016) indica que las acciones educativas de enseñanza y de aprendizaje es un andamiaje holístico entre la comprensión,  la  tolerancia, la  cooperación,  la  convivencia,   sustentado en la técnica amorosa del reconocimiento, que se manifiesta en los cuidados permitirán mejorar las relaciones dialógicas entre docente- estudiante, estudiante-estudiante.

A manera de reflexión, en el sistema mundo y su representación micro, en el espacio docente, se han dado ajustes necesarios para adaptar la enseñanza de acuerdo con esta nueva normalidad. La academia, ha dado paso a la clase invertida, y un sinnúmero de alternativas mediadas por tecnología. Tuvo que existir una fuerza arrasadora para que el mundo sepa que el sufrimiento no distingue etnias ni estratos sociales, y que, en la  praxis  académica,  en  los formatos que sean, seguir inculcando y promulgando la sana convivencia y el ejercicio de derechos.

En definitiva, el docente, dentro de los entornos educativos, son catalogados como los más idóneos para contribuir en el desarrollo académico social, encargado de formar seres humanos con iniciativa y prospectiva para enfrentar y resolver, en primer lugar, sus propios temores ante una sociedad impredecible que tiene sus propias reglas, y que si el estudiante no está preparado para asumir su rol, debe buscar otras estrategias para involucrarse en la lucha por aprender a competir en igual de condiciones en este mundo global competitivo.

El docente, quien tiene la técnica, la didáctica y los recursos, que se constituyen en un modo de vida y que apasiona, puede realmente motivar a la comprensión y ejercicio de valores, para que el discente se incorpore de forma adecuada a la sociedad, es así como se genera una interrogante:

¿cuál es el rol de la Universidad entonces?

Como asevera Cortés (2007)

 

Por más que se quiera reducir la educación, ella no es solamente instrumental, no sólo  forma  en una técnica o en una profesión, porque la enseñanza lleva implícita una ética del trabajo; un profesor, en el proceso de enseñanza- aprendizaje, piensa en varios niveles, dimensiones y tiempos, no sólo forma profesionales, sino también individuos críticos, responsables, éticos, racionales hasta para resolver sus conflictos; al enseñar aprende, se enfrenta a tiempos diferentes; él, que trae el legado del pasado, debe formar al estudiante mirando el futuro; enseña abstracciones que deben incorporarse de manera  pertinente a la sociedad. Una universidad obedece a procesos sociales bastante intrincados, posee un compromiso con el desarrollo humano, pero a su vez resuelve exigencias coyunturales de los procesos productivos; conjuga y resuelve las tensiones entre lo local y lo global; y, además, debe mirar el horizonte del desarrollo  científico y apropiar localmente ese nuevo conocimiento. (Cortés, 2007)

 

La universalidad de la educación superior, privada o estatal hizo posible la movilidad y la inclusión de estudiantes de cualquier latitud  del país,  motivados  por  seguir  un  proceso  de formación y alcanzar un título en una especialidad especifica. Esto permite que exista gran cantidad de estudiantes universitarios conviviendo con compañeros de otras latitudes, integrando de manera plena la multi etnicidad y pluriculturalidad, además de las diversidades de identidad y orientación sexual.

En el aula no hay banderas diferentes, existen personas con ganas de superarse, con ímpetu por aprender y aprehender, a convivir entre la heterogeneidad, a ser y a estar.

El rol docente debe aprovechar la diversidad que existe en el aula y de explotar el bagaje social, cultural y personal que el estudiante trae consigo, que pueden constituirse en un cúmulo de experiencias a ser consideradas para hacer un proceso constructivo e integrados en el acto de enseñar y de aprender.


 


En la práctica docente, los profesores deben, a criterio de Vargas (2016)

Propenderalaintegracióndialógicade la diversidad de saberes, metodologías cognoscitivas, formas de innovación, procesos creativos, plurilingüismo, pluriestilismo,  perspectivas  éticas  y estéticas” Además, es  pertinente  la inclusión de nuevas maneras de comunicación pedagógica basadas en las tecnologías, pero sin que estas formas de interacción sustituyan, excluyan o elidan la comunicación dialógica —en el encuentro auténtico entre el yo y el tú. (Vargas, 2016)

 

Esto implica que la función es continuar con ese encuentro pedagógico, independientemente de la modalidad de estudio, mirar a los ojos a de los estudiantes, y propiciar que el acto del amor al arte de enseñar trascienda barreras.

 

En cuanto a la metodología:

El    método    que    se    utilizó    para    esta investigación es cualitativo interpretativo, la propuesta se focaliza en un estudio de caso, de la carrera Pedagogía de los Idiomas Nacionales y Extranjeros de la Universidad de Machala. El sujeto de estudio tiene 26 años, mestiza, vive en un barrio marginal de la ciudad de Machala, el Guabo, tiene disforia de género según el DSM-V. A través de la técnica de la entrevista narrativa (narrativas autobiográficas), se indaga desde las propias voces del sujeto de estudio y se extrae la información de fuente primaria, la tarea del investigador es  captar  e  interpretar lo que está plasmado en los documentos personales, fotografías, notas, diarios, cartas, etc., y entretejerlo con las narraciones que los sujetos dan. (Landín Miranda & Sánchez Trejo,2019)


El instrumento de recolección de datos es el guion de entrevista, se realizó un empedrado interpretativo hermenéutico en donde se hace uso de la dialéctica sociocrítica para comprender al sujeto que está y es. En este sentido se pretende realizar una correcta interpretación, identificando pensamientos  con  el  objetivo  de alcanzar un auténtico descubrimiento, empleando el diálogo sincero y reflexivo para entender el lado del otro.

Se presenta un presupuesto metodológico en  donde  el  posicionamiento  está  dado  desde la mirada del actor, donde se considera fundamental rescatar las voces del protagonista de los procesos complejos, dinámicos y de profunda transformación de hábitos, prácticas y acciones que han constituido al sujeto-objeto de investigación, en donde los investigadores visitan los territorios del actor sin emitir juicios vacíos de otredad y se subjetivan por ósmosis inversa (eliminamos lo dogmático que discrimina y censura).

La posición epistemológica ancla sus bases en el puerto de la teoría crítica (social) y articula también miradas sexo-genéricas decoloniales que problematicen la Biodiversidad en la formación universitaria, la resistencias y dogmas presentes en la sociedad como dispositivo de censura y discriminación.

Pilay, Valenzuela, & Mendieta (2020) citando a Vargas (2016) manifiestan que la otredad concibe una educación dialogante, es entender la educación como la "guía" del diálogo desde donde se construyen personas reales a partir de “sus emociones, cognición, moralidad, razón y estética”. Es darle al otro, el reconocimiento de su presencia, es no ignorarlo.

La alteridad para Pilay, Valenzuela, & Mendieta (2020) en concordancia con Gonzáles (2008) es donde se interpreta al otro desde el proceso evolutivo que lleve el determinado yo. La alteridad es entender a la persona o una identidad, más allá de lo que siente, a entender sus razones, ideas, como piensa y en base a qué lo hace, estudios, conocimientos, experiencias.

Para Toledo (2020) la otredad debe estar presente en el salón de clase siempre. Se debe mirar al otro como si fuéramos nosotros, porque nosotros, aunque seamos los otros, podemos ser los otros mirados desde otro nosotros. Eso es lo que suele suceder con el docente, muchas veces se pone en el lugar del otro para entender, sin descuidar mi otredad, es decir manifestar un acto de solidaridad.

 

Análisis e interpretación de los resultados: Una vez aplicado el instrumento de recolección de la información, se procedió a realizar la interpretación  del  estudio de caso, la información que suministre este análisis permitirá llegar a las conclusiones de esta investigación, utilizando el método cualitativo- interpretativo de la historia de vida de una persona transgénero en un proceso de formación profesional, que se desarrolla en un espacio explícito como es la Universidad de Machala, mostrando la otredad y la alteridad que tienen los docentes universitarios. Se han tomado las preguntas más relevantes de la entrevista.

 

¿Nos puedes contar cómo fue tu niñez?

Mi niñez… Desde entonces vivo en un barrio peligroso, pero creo que fue normal en sí, porque cuando era más pequeña me relacionaba más con los vecinos, en ese entonces, pero ahora ya no, creo que también por lo que ya maduras, pero antes recuerdo que salía jugar con mis vecinitos juegos tradicionales como la quemada y juegos así.

         La entrevistada mantuvo un buen trato con sus vecinos a pesar de ser un barrio peligroso.


¿Cómo fue la relación con tus padres en la infancia?

Mi mamá siempre ha estado ahí, he tenido una infancia bonita porque a mi mamá siempre le ha gustado viajar, mi mamá además que familia en Cuenca, cuando era pequeña nos íbamos mucho a Cuenca de hecho me gusta Cuenca, me gusta el clima, la ciudad, el ambiente, la gente.

 

         Manifiesta que tiene recuerdos bonitos de su infancia, debido a que viajaba mucho con su mamá. Mostrando la buena relación entre una madre y su hijo.

 

¿A qué escuela y colegio asististe? ¿Cómo fue tu experiencia en la escuela?

Estudié en la Escuela General Manuel Serrano y mi colegio se llama Dr. José Velasco Ibarra. Mi escuela era una escuela solo de niños en ese entonces, ahora es mixta, mi experiencia no fue tan agradable por el hecho que sufría de bullying porque era diferente entre comillas.

 

         Revela la problemática del acoso escolar que existía en las escuelas en ese entonces, aunque aún existen, ahora se evidencia más aceptación de la diversidad.

 

¿Recuerdas cómo fue el trato de tus compañeritos en la Escuela?

Si, ahí sufrí un poco de bullying, porque siempre he tenido una voz  más  femenina,  más delicada, mis compañeros siempre me molestaban, de hecho, una vez me encerraron en el baño, bueno no se si llamarlos homofóbicos, pero no en ese tiempo, es mucho, no puedo decir eso, porque los papás les enseñan a ser así, como antes tenían las creencias no te juntes con personas así o tú te vas hacer así, los niños en ese tiempo como que todo lo veían mal, por el mismo hecho de que los papás le inducían a eso a mí me trataban mal.


 


         La infancia de la entrevistada nos hace notar que a pesar del bullying que sufrió de ciertos compañeros, nunca guardó rencor, comprendiendo que eran niños y quizás  mal influenciados por sus padres hacían comentarios despectivos hacia su persona.

 

¿Cuándo se enteraron tus padres sobre tus sentimientos, deseos, comportamiento, conducta? ¿Quién no aceptó tu decisión?

 

Mi mamá se enteró porque yo misma le dije, fue más o menos cuando yo tenía como 15 años, cuando se lo dije ella no aceptó, mi familia es muy creyente y te imaginas lo que me dijeron... mi papá se enteró después, porque tengo un papá que es muy machista, me daba terror decirle, yo se lo oculte por mucho tiempo, yo creo que se lo dije en la universidad, aunque ya sospechaba, hasta me botaron de la casa, pero mi mamá me llamó llorando y ahí es que regrese a casa con mi familia, eso pasó un tiempo atrás.

 

         Podemos ver la lucha de poderes, debido a que no tuvo una buena aceptación respecto a su elección y transición. Con el tiempo han aprendido a convivir y respetar su decisión.

 

¿Cuán difícil fue para ti misma aceptarte como ella no como él?

Fue difícil, porque mi familia es creyente, tengo familia dividida entre religiones, mi mamá y mi papá son católicos, mi abuelita es muy católica es catequista, mi tía es evangélica y mi hermano es cristiano, ya se imagina es algo medio complicado, demasiado diría yo, pensaba y me decía estoy mal porque no me pueden gustar los hombres siendo hombre en ese tiempo y después me dije no está mal, porque luego me di cuenta que existían personas de la comunidad LGBTI+, entonces dije no está mal, ¿Por qué no voy a aceptarme yo misma por la religión?,


siempre cuando me dicen que la Biblia dice esto, que lo demás… Yo les digo, bueno si estoy mal que Dios me juzgue, pero ustedes no me pueden juzgar y eso les respondo a mis familiares.

 

         La familia manifestaba asombro y rechazo, por lo que ella tenía una lucha interna entre lo que debía ser para su familia y lo que quería ser, hasta que investigó que existen personas como ellas, luchando por su diversidad.

 

¿A qué edad sentiste que la gente o grupo de personas te empezaron aceptar como Brenda?

Creo que más en la etapa universitaria, en la universidad empecé a transicionar, anterior a eso, todavía me vestía como hombre y todo lo demás, además mi mamá empezó aceptarme cuando decidí cambiarme de nombre, es como que ella dijo: si ella quiere llamarse Brenda, si ella se siente cómoda siendo mujer, ya la acepto, pero de ahí anteriormente de hecho no quería que me cambie de nombre, me hizo un drama, como yo siempre defiendo mis ideales y muy decidida, como tenía dinero y fui y me cambie de nombre .

 

         La universidad le brindó un mundo de posibilidades, tomar la  decisión  de  llevar a cabo su transición, ya que las personas demostraron acciones enmarcadas en la otredad y alteridad, dando paso a realizar su cambio de identidad.

 

¿Alguna vez te has sentido discriminada?

Si en muchas ocasiones, no solo como te dije en la institución educativa que estuve, también lo he sentido en la calle, porque a veces las personas dicen cosas que no tiene sentido, también chicos de otras carreras, pero en la carrera de inglés es más de mente abierta, tu encuentras de todo, chicos gay, lesbianas, chicas trans, bisexuales, entonces si en muchos ámbitos ahora también en el ámbito laboral, como en mi cédula dice género, no dice sexo, obviamente cuando ven mi cédula saben que soy una chica transexual, entonces es como que no me aceptan.

 

         Se nota que aún existe discriminación en la sociedad, tanto en el ámbito escolar como seglar especialmente hacia las personas con diversidad sexo-genérica. La universidad de Brenda ha tenido acogida de estos grupos vulnerables.

 

Hablando de docentes, y desde tu perspectiva ¿Quiénes fueron los más consecuentes contigo, es decir aquellos que tu sentiste te trataron mejor?

Creo que el mejor docente fue mi coordinador, o sea el coordinador de la carrera, el licenciado John, nosotros también reabrimos la carrera, porque mi promoción fue la que abrió nuevamente la carrera porque se había cerrado hace tres años en ese entonces, mi coordinador me decía, no hay más cursos, no hay más semestres, encárgate de esto, encárgate de planificar para la feria de ciencia, era como que siempre quería que esté presente, que este en todo, entonces era como que me motivaba a seguir, y aparte de ser como un profesor es como un amigo.

 

         El docente con vocación sabe que tiene  una ardua labor como formador del otro, esto implica reconocer y respetar los intereses, creencias, motivaciones, cultura, historicidad, carencias, situación de vulnerabilidad, inquietudes, ritmos y estilos de aprendizajes. Podemos notar cómo un docente en especial motivó a Brenda a superarse sin discriminar la transición que tuvo en su etapa universitaria.


¿Es complicado entonces conseguir trabajo?

Si es complicado, aquí en Ecuador es complicado, como le dije siempre he tenido un aliado, el licenciado John, es muy bien amigo mío, ahorita me ayudó a conseguir un trabajo en una institución.

 

         Ecuador es uno de los países con mayor índice de desempleo, pertenecer a otro género dificulta más el acceso a un empleo digno, debido a los prejuicios.

 

El estudio de caso a través de la entrevista a profundidad permitió recolectar información, para luego interpretar su experiencia de vida, en este caso su transición como una nueva persona, entendiendo las dificultades de dicho proceso. Se realizó un cuestionario de 20 preguntas abiertas que fueron compartidas previamente con la persona entrevistada, la entrevista fue realizada en dos partes, la primera parte de la entrevista se enfocó en la infancia del sujeto de estudio y la segunda parte se enfocó en la etapa universitaria hasta llegar a su transición. Se puede ver que la familia es la primera en negarse al cambio de género de una persona además de las dificultades para conseguir trabajo.

El objetivo de la entrevista era conseguir    a través de un diálogo ameno y respetuoso información que permita conocer el lado humano del entrevistado, comprendiendo su ser, permitiendo comprender la diversidad sexo-genérica desde la mirada de la otredad y la alteridad en las aulas universitarias.

CONCLUSIONES

         En cuanto al proceso metodológico utilizado, que para este caso es la entrevista a profundidad, se destaca que es una técnica cualitativa de mucha utilidad, puesto que permitió entenderla o tredady alteridades de la experiencia de una persona transgénero en las diferentes etapa de su vida, que fueron relatadas en una entrevista dividida en dos etapas, la primera trató sobre la infancia del sujeto de estudio y la segunda parte sobre la etapa universitaria, su transición y la mirada inclusiva de su docente.

         Una de las etapas determinantes en el proceso metodológico es  la  de  interpretación,  esta, cuando tiene suficientes  elementos  de “neutralidad”, permite al investigador ahondar en lo profundo del sujeto de estudio, como sus miedos, inquietudes, sueños, anhelos, sin descuidar al otro como un ser integral, que se desenvuelve, en este estudio en un contexto educativo, y mucho más allá el entorno en donde se llevó a cabo su transición sexo-genérica.

         Desde la mirada de la alteridad y la otredad, el maestro universitario y su práctica docente es integrador, tolerante e inclusivo, con esa premisa  estará  preparado  para  que las diferencias individuales de sus estudiantes no influyan en el proceso de enseñanza, desde esta perspectiva, en los espacios estudiantiles al estudiante se le invita a la práctica de valores, compromisos y sobre todo responsabilidad, todas estas cualidades se manifiestan en el sujeto de este estudio, quien ha manifestado a través de la entrevista, como los elementos antes mencionados, se han promovido en los diversos espacios de formación, por ende, se genera un entorno de sana convivencia en el cual, su diversidad sexo-genérica, es aceptada, respetada y valorada.

         Los aspectos de diversidad, y en este caso diversidad sexo-genérica, genera resistencia producto del desconocimiento que se ampara en el temor a lo “diferente”, hay estudiantes en el aula de todos los matices, líderes y seguidores, entusiastas y conformes, en relación con la estudiante transgénero, en su etapa de formación profesional, a más de pertenecer a las minorías sexuales, es un ser humano de ligera espontaneidad, original, con un excelente sentido del humor, quien siempre defendió su identidad sexo-genérica, y que a través de su  comportamiento,  logró generar un entorno empático, el cual permitió inspirar respeto, cariño y una adecuada inclusión, convirtiéndola en una lideresa en su curso, su carrera y su facultad.

 

REFERENCIAS

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